Ésta es la editorial que escribí para el Zigma en la Política (@zigmapolitca) del 25 de junio del 2013
:::::::::::::::::
ALBERTO PATISHTAN, EL PRESO POLÍTICO MÁS IMPORTANTE DE MÉXICO
Pablo Reyna (@preynae)
25 de Junio de 2013
Alberto Patishtan Gómez es el preso
político más importante de este país. El profesor indígena chiapaneco y
luchador social cumplió el pasado 19 de junio trece años en prisión por un
crimen que no cometió. Cuando el último recurso jurídico está por resolver su
permanencia en prisión o su liberación, vale la pena recordar el contexto de
guerra, paramilitarización y conflicto
político en el que fue detenido.
En Chiapas, entre 1997 y el 2000, el
conflicto entre el EZLN y el gobierno del presidente Ernesto Zedillo Ponce de
León y el gobernador sustituto Roberto Albores Guillén se vivió en la permanente
tensión de la guerra de baja intensidad. En ese estado del sureste del país, estaban
desplegados 1 de cada 5 efectivos castrenses, es decir, alrededor de 70 mil
soldados en más de 300 establecimientos militares y, además, proliferaban
grupos paramilitares alrededor de los territorios zapatistas y pro-zapatistas.
Esta guerra sucia nos despertó el 22
de diciembre de 1997 con la masacre de 45 mujeres, hombres y niños de la
Sociedad Civil Las Abejas – organización indígena pacifica y pacifista - en la
comunidad de Acteal en el municipio de Chenalhó, la matanza más cruel de la que
tuviéramos memoria y por la cual aún se exige justicia.
Seis meses después, en junio de 1998,
cientos de soldados y policías estatales, bajo las órdenes del gobernador
Albores Guillén, avanzaron y desmantelaron el municipio autónomo zapatista de
San Juan de la Libertad, municipio oficial de El Bosque, a 100 kilómetros al
norte de la capital chiapaneca. Esa ofensiva provocó los primeros
enfrentamientos entre el EZLN y el gobierno desde la tregua de enero de 1994. Después
del ‘desmantelamiento’, de El Bosque (municipio que, según el periódico
Reforma, entre 1997 y el 2000, registró
25 personas muertas y más de 30 heridas por violencia política) el gobierno
estatal instaló como alcalde a su
incondicional priísta Manuel Gómez Ruíz. Durante su gobierno, el alcalde
impuesto enfrentó la oposición del pueblo de El Bosque en la que participaba
abiertamente el profesor Alberto Patishtan Gómez, quien redactó, a nombre del
pueblo de El Bosque, una carta denunciando la corrupción y arbitrariedades y
exigiendo la destitución de Manuel Gómez
Ruíz.
Ya en el verano del año 2000. Las
campañas electorales, los rostros y promesas de Fox, Cárdenas y Labastida
acaparaban las portadas y columnas de todos los periódicos. En el aire se
sentía la posibilidad de la alternancia. El sueño de la democracia, de la paz. Ya
habíamos escuchado que en 15 minutos se podría llevar paz a Chiapas. Faltaban
tan solo 21 días para las elecciones cuando el 12 de junio un grupo de civiles
armados emboscó un vehículo estatal y asesinó a siete elementos policiacos (entre
ellos a un comandante de la policía estatal y otro de la policía municipal) e
hirió a otras dos personas en un camino de terracería en el municipio de El
Bosque. Del ataque sobrevivieron Rosemberg Gómez, hijo del alcalde príista, y
Belisario Gómez Pérez. Al día siguiente tanto el EZLN como el pueblo de El
Bosque se deslindaron del ataque y denunciaron que éste tenía indicios de ser
auspiciado por el gobierno con la intención de aumentar la presencia militar en
la zona.
Los dos sobrevivientes declararon
versiones distintas sobre lo ocurrido. Para el agente estatal Belisario Gómez
los tiradores nunca fueron visibles desde la patrulla en la que viajaban, por
lo que no reconoció a nadie. En cambio, Rosemberg Gómez afirmó reconocer, por
la voz, al profesor Alberto Patishtan, opositor al gobierno de su padre,
delante del vehículo mientras sicarios disparaban.
Dos personas fueron detenidas basadas
en ese único testimonio: Alberto Patishtan y el indígena zapatista Salvador
López González. Salvador fue liberado un mes después por las inconsistencias en
el testimonio; en cambio Alberto, aún con decenas de testigos que declararon
haber estado con él en Simojovel y Huituipán el día de la emboscada, fue
condenado a la pena máxima de 60 años en prisión – en los hechos, una cadena
perpetua.
Desde entonces, centros de derechos
humanos, universidades, organizaciones sociales, personalidades nacionales e
internacionales se han pronunciado por la liberación del profe. Más pruebas se
han aportado para demostrar su inocencia. Todos, incluso el gobernador Manuel
Velasco, el subcomandante Marcos y el obispo de San Cristobal de las Casas,
Felipe Arizmendí, están de acuerdo en que se debe liberar al preso político más
importante de México, Alberto Patishtan, quien después de 13 años en prisión,
agotará en estas semanas el último recurso jurídico posible en México para
recuperar su libertad.
Zigma Política - Alberto Patishtan (26/06/13) by Zigma909 on Mixcloud
No hay comentarios.:
Publicar un comentario