Crisis de la modernidad - crisis de la ciencia moderna-
La aplicación sin límites del proyecto civilizatorio occidental, cuyos rasgos fundamentales son: el progreso, la ciencia, el dominio de la naturaleza, el crecimiento económico e industrial, las democracias representativas y los estados – nación, ha causado una crisis global reflejada en los ámbitos ecológico, social, económico y cultural. Esta problemática multidimensional es considerada como la crisis de la modernidad. El calentamiento global, la contaminación, la deforestación sistemática, el desgaste de los suelos, el aumento de la marginación, la exclusión y la pobreza de casi la mitad de la población mundial, la muy inequitativa distribución de la riqueza, la creciente erosión cultural, la desaparición de lenguas y tradiciones locales, además de la violencia colectiva son algunas de las expresiones del fracaso del ideal modernizador.
La crisis del proyecto civilizatorio dominante cimbra la concepción de la ciencia como único camino válido para la generación de conocimiento “verdadero”. La pretensión de la ciencia moderna de revelar, controlar y predecir las leyes que rigen al Universo mediante la razón, la observación objetiva, el riguroso apego a un sólo método, la simplificación y el análisis del objeto de estudio, ha tenido resultados contrastantes. Por un lado, la sobreespecialización científica ha permitido el avance del conocimiento en beneficio de la humanidad; por otra parte, esta parcelación impide la comprensión integral de la multidimensionalidad de la crisis contemporánea. Así, la crisis de la modernidad es también una crisis epistemológica.
Ante el panorama donde múltiples procesos ambientales, sociales, económicos, políticos y productivos están interrelacionados, se hace evidente la necesidad de buscar alternativas en todas las dimensiones de la relación sociedad – naturaleza. Como respuesta a la crisis epistemológica surge la propuesta teórico – metodológica de los sistemas complejos.
Enfoque de Sistemas Complejos
Un sistema complejo (SC) representa una propuesta conceptual de organización de una parte de la realidad, para hacerla inteligible. En un SC convergen y se interrelacionan procesos heterogéneos y multiescalares, cuya estructura y funcionamiento se da como totalidad organizada e indescomponible. La diversidad de procesos interrelacionados hace necesario para una investigación con enfoque de SC, un abordaje interdisciplinario.
El enfoque de SC parte desde una posición constructivista. En el constructivismo - a diferencia de lo postulado por el positivismo lógico- la realidad no está dada, ni en espera de ser descubierta por un sujeto observador neutro e independiente. Esto es muy importante, ya que el investigador construye el sistema que propone como una explicación conceptual de la realidad observada. El sistema no se toma de la realidad, sino que se va construyendo a lo largo de la investigación, donde las prioridades, juicios, intereses y contexto histórico - social del investigador son condicionantes para su construcción. Por lo tanto es el investigador (o grupo de investigadores) quien decide cuáles elementos, fenómenos, procesos y escalas son incluidos; además le atribuye (no descubre) ciertas propiedades y funciones al sistema, como posibles respuestas al problema que se ha planteado.
Para poder construir un sistema, es imprescindible un marco epistémico es decir, la pregunta o conjunto de preguntas que el investigador se plantea ante la situación que pretende estudiar. Este marco guiará la selección de los componentes del sistema: los límites, los elementos, sus interrelaciones y las relaciones con factores externos.
Los límites espacio – temporales de un SC no están dados en la realidad, por lo que el investigador debe imponerlos – lo menos arbitrariamente posible - de manera tal que el objeto de estudio tenga cierta organización.
Los elementos (o subsistemas) que se deben incluir son aquellos sin los cuales el sistema no existiría. Éstos se interrelacionan y son interdefinibles es decir, que se afectan mutuamente. Cabe mencionar que cada uno de los subsistemas tiene sus propios fenómenos y escalas de tiempo, lo que refleja la multiescalaridad del sistema y hace necesaria la perspectiva interdisciplinaria en su estudio.
En el enfoque de SC, la estructura del sistema no está dada por los elementos que lo conforman, sino por las interrelaciones entre ellos. Muchas de las propiedades del sistema no son las de sus elementos, sino las de su estructura. Las propiedades estructurales determinan la estabilidad, resiliencia y vulnerabilidad del sistema frente a los cambios internos o externos. Los procesos de cambio en la estructura es decir, el funcionamiento del sistema en el tiempo, son el objetivo de una investigación con enfoque de SC.
El SC es entendido como una entidad abierta que se relaciona con otros sistemas (factores externos) independientes. Es importante mencionar que los factores externos, a pesar de ser autónomos del sistema, tienen una influencia muy importante sobre él. Las condiciones de contorno es decir, las interacciones que se dan entre el sistema y los factores externos, pueden darse a través de flujos de entrada (insumos) o de salida (productos) del sistema. Algunos ejemplos de condiciones de contorno son: tecnología, crédito, materias primas, energía, capacitación, remesas, condiciones laborales y de mercado, y dinero (insumos); emigración, mercancías y capital social (productos).
Las condiciones de contorno son las principales generadoras de cambio en el sistema. Cualquier alteración en la frecuencia o intensidad de alguna de ellas perturbará la estructura del sistema. Si la perturbación está en un rango asimilable, el sistema en equilibrio dinámico, mantendrá su funcionamiento (estructuración). Sin embargo, si la perturbación rebasa el límite asimilable, el sistema se desestructura y posteriormente se reorganiza en una nueva estructura estable bajo las nuevas condiciones (desestructuración y reestructuración).
Los procesos de estructuración, desestructuración y reestructuración exigen una perspectiva diacrónica. En el estudio de un SC no es suficiente tomar una “fotografía” de la estructura del sistema en un tiempo. La evolución de los mecanismos que determinan el funcionamiento del sistema es prioritaria en este enfoque.
Como mencionamos anteriormente, un SC es una propuesta conceptual mediante la cual el investigador pretende responder una pregunta. Siendo una construcción teórica, a lo largo de la investigación éste debe ser constantemente validado empíricamente. Así el sistema irá cambiando hasta que sin contradecir a la realidad, pueda ayudar a comprender un proceso en su complejidad.
Debido a la heterogeneidad y multiescalaridad de sus elementos constitutivos, un SC requiere de una perspectiva interdisciplinaria para su estudio. La interdisciplina busca dar un enfoque integral al problema analizado. La visión interdisciplinaria en SC requiere de un marco epistémico establecido a priori que guíe los quehaceres de cada uno de los especialistas que conforman el equipo. Así, la investigación interdisciplinaria intercala dos pasos diferentes: la integración, en la cual se plantea el marco epistémico y teórico común para todo el equipo; y la diferenciación, en la cual cada miembro del equipo trabajará con su especialidad disciplinaria para tratar de comprender el proceso en estudio.
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